¿Qué trastornos neurológicos están asociados al estrés prolongado?
1. Dolor de cabeza por estrés
El dolor de cabeza es una de las manifestaciones más comunes del impacto del estrés en el sistema nervioso. Se caracteriza por una sensación de presión en la cabeza y el cuello, y puede volverse crónico, si no se maneja adecuadamente.
Síntomas:
- Dolor opresivo en ambos lados de la cabeza
- Sensación de tensión en los músculos del cuello y los hombros
- Fatiga y dificultades para concentrarse
2. Trastorno neurológico funcional (TNF)
El trastorno neurológico funcional (TNF) ocurre cuando el sistema nervioso presenta alteraciones en su funcionamiento sin una causa estructural evidente. En esta condición, el cerebro tiene dificultades para procesar y enviar señales adecuadamente a diferentes partes del cuerpo, lo que genera síntomas que pueden parecer similares a los de otras enfermedades neurológicas.
Síntomas:
- Debilidad o parálisis en las extremidades
- Movimientos involuntarios como temblores y sacudidas
- Problemas en la coordinación y el equilibrio
- Pérdida temporal de la sensibilidad en algunas partes del cuerpo
- Posibles causas y factores de riesgo:
- Si bien no se ha identificado una causa específica para el TNF, se ha observado que el estrés crónico, los traumas físicos o emocionales pueden desencadenarlo. En algunos casos, no existe un factor desencadenante claro.
Factores que pueden aumentar la susceptibilidad al TNF:
- Presencia de otra afección neurológica
- Trastornos de salud mental
- Dolor crónico o fatiga persistente
- Exposición prolongada al estrés
- Antecedentes de abuso, negligencia o trauma infantil
El TNF puede afectar a personas de cualquier edad, aunque es más probable en mujeres menores de 50 años. A partir de esa edad, su incidencia es similar en hombres y mujeres.
3. Ansiedad y depresión con manifestaciones neurológicas
La ansiedad y la depresión pueden generar síntomas neurológicos como mareos, alteraciones en la memoria y dificultades cognitivas. El estrés crónico puede afectar la plasticidad neuronal y predisponer a la aparición de estos trastornos.
4. Riesgo de eventos cerebrovasculares
El estrés prolongado aumenta la presión arterial y favorece la aparición de enfermedades cardiovasculares, lo que puede incrementar el riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular (ACV).